viernes, 21 de marzo de 2014

Intercambio de idiomas en Madrid

Una de las formas más efectivas para aprender inglés es hablarlo. Ya lo dice el dicho: “a actuar se aprende actuando”. El problema de los españoles para hablar un inglés fluido es la vergüenza: el eterno enemigo.  Es la que nos bloquea, la que nos impide mejorar en la pronunciación y poder comunicarnos con eficacia. Hablar significa interactuar con otra persona y supone tanto hablar como escuchar esta es la clave tal y como lo afirma English town.

Para solventar este problema se han inventado varias técnicas, pero la mejor es practicar el inglés con un nativo. Por suerte para nosotros los españoles, vienen a nuestro país y a nuestra capital muchos turistas y extranjeros que se quedan un tiempo para conocer nuestra cultura. Y que mejor forma de conocerla que conociéndonos a nosotros y que la vean con sus propios ojos.

Una de las tendencias más actuales para aprender idiomas es el intercambio en bares.  Puedes acudir a locales o pubs para practicar el idioma que quieras. Solo tienes que acercarte a alguno de los bares que acojan esta oferta tan demandada y  hablar en el idioma que desees con un café delante. Sin coste alguno, aprender idiomas aquí es gratis. 




El idioma más solicitado tal y como cuenta Mark es el inglés, pero puedes aprender otros como el italiano o el francés.  Mark es el encargado del intercambio de idiomas del bar irlandés del bar O’ Neil situado en huertas (Calle Príncipe, 8). Allí su labor principal es organizar a aquellas personas que acuden para hablar otro idioma. En este bar esta actividad no se da todos los días, solo los martes de 20:00 hasta la hora de cierre.  Cada bar tiene su propio horario y día de para realizar esta actividad. Una vez que entras en este bar, Mark es el encargado de recibirte y de ponerte una pegatina con el idioma que quieres hablar, así la gente que te ve se dirige a ti en el idioma que esté escrito en esta pegatina. Un sistema práctico, sencillo y sobre todo útil.

La ventaja de estos sitios es que además  de poner en práctica los conocimientos de un idioma conoces gente y llegas incluso a hacer amigos. Mucha de las personas que acuden al intercambio de idiomas está en nuestro país de paso, de modo que se han dado casos, tal y como cuenta Mark, de gente que tras estar practicando el idioma durante un tiempo ha hecho amistad  con quien hablaba en otro idioma y luego han ido a visitarle al país del que procede.

En Madrid contamos con un amplio número de bares y locales que dedican al menos un día a la semana para realizar esta práctica, ya que cada vez es más demandada. Estos locales se encuentran por cualquier parte de la capital, no están necesariamente en el centro. Normalmente reservan los días en los que acude menos gente al bar (es decir, se evitan los fines de semana) para realizar el intercambio, así la gente puede practicar el idioma sin agobios. Además con esta nueva práctica que cada vez se extiende más los pubs o bares consiguen hacer más negocio en los días en los que apenas suele acudir gente.

Esta es una oferta muy atractiva para los estudiantes. Hay carreras en las que no es muy necesario el inglés, pero para estar mejor preparado para el mundo laboral es inevitable saber idiomas. Además siempre está el hándicap del dinero. Por lo que esta se convierte en una solución de lo más divertida para aprender.

Sin duda los idiomas son un valor añadido en el currículum, y cada vez se demandan y exigen más.  Las barreras del idioma es lo que muchas veces impide dar el paso a buscar trabajo fuera, en otros países, y esta es una forma barata de romperla y poder adquirir la capacidad de hablar con fluidez otra lengua.  Hoy en día los idiomas no son un plus, sino una necesidad para buscar un trabajo fuera y dentro de nuestras fronteras.

BARES:
Beer Station
Este local se sitúa en la calle Cuesta de Santo Domingo, 22. Con una decoración de una estación de tren, se realizan todos los jueves a las 22.00 las reuniones para el intercambio de idiomas.

Gracie Mille 
El local idóneo para aquellos que prefieran el italiano. Los intercambios son los miércoles, dentro de un ambiente muy internacional y tapas italianas de degustación gratis. Situado en la calle Mayor, 31.

The Corne’s clock
En la plaza de Perú se encuentra este pub irlandés donde al intercambio de idiomas se le suman juegos. Todos los lunes a las 22.00 hay un trivial bilingüe donde se participa por equipos para practicar el inglés de una forma divertida.

O'neils
Situado en la zona de huertas, calle príncipe número 9 este bar ofrece un intercambio para varios idiomas: francés, portugués, italiano... pero sobre todo aquó podrás practicar el inglés ya que son varios los irlandeses que se acercan los martes  a practicar español y conocer gente.

Café Madrid
Es un café al estilo clásico. Los intercambios son los miércoles y jueves a partir de las 21.30. Está situado por la zona de Ópera, Calle Escalinata. 

lunes, 17 de marzo de 2014

Enric Sopena y punto

Es una de las figuras del periodismo español, le pese a quien le pese, independientemente de si gusta o no su trabajo. Enric Sopena, es periodista y director de elplural.com. Nacido en Barcelona está casado con la también periodista Margarita Sáenz Díez Trías y es padre de tres hijos. Publicó un libro de investigación en 2008 titulado “La España de Rajoy”.

Su pelo blanco, siempre bien peinado, contrasta  sus pobladas cejas negras. Siempre con su inseparable traje de chaqueta, muy bien vestido y con apariencia burguesa, utiliza corbata y unos relucientes gemelos para abotonar los puños de su camisa bien planchada. Este es Enric Sopena, un periodista que se ha convertido en uno de los altavoces de la izquierda española.  Firme defensor de Zapatero, ya lo defendía con declaraciones en 2010 que hoy en día repite: “En las críticas a Zapatero no hay ni un solo atisbo de corrupción que lo manche a él o a su entorno”. Interesante.

En su participación en tertulias siempre aparece, al principio, tranquilo. Habla pausadamente en programas ya extinguidos como “La Noria” o “El gran debate” de Telecinco. Pausadamente hasta que se le contradice. En ese momento es cuando se muestra más radical. Altivo y prepotente suele burlarse de aquel que no comparta sus ideas.

Licenciado por la universidad de Navarra, comienza su andadura profesional en la entonces llamada “Vanguardia española”. Nacido en 1945 Enric Sopena Daganzo ha conocido de primera mano la evolución del periodismo español, desde la llegada de la televisión hasta el los avances de la nueva era con el rompedor internet. La evolución histórica del periodismo español y todo lo cambiante y variable que ha sido, va de la mano con la evolución ideológica que este periodista ha vivido.

Que mejor cosa que hacer en la jubilación que dedicarse al periodismo y montar un periódico. Fue en 2005: El Plural. Periódico apellidado como “digital progresista”. Su nacimiento vino propiciado para compensar un desequilibro a favor de la derecha española. Así lo afirmaba: “La derecha ha sabido utilizar mucho mejor lo digital”. Y añadía: “Es progresista, porque, salvo excepciones, los periódicos en internet giran en torno a la derecha”.  Un hombre que no dudó en adaptarse a las nuevas tecnologías, está presente en twitter con más de 6.000 seguidores.

Este periodista catalán comenzó siendo numerario del Opus Dei, prelatura que hoy día critica mordazmente, al igual que todas las acciones de la Iglesia católica, independientemente de si estas son buenas o malas, pero eso no tiene relevancia para él. Luego, su vida, dio uno de muchos giros y ahora es un fanático del “zapaterismo”. También fiel seguidor y portavoz del PSOE, admirador de Carma Chacón, casada con uno de sus empleados favoritos: el periodista Miguel Barroso.



En enero de 1985, bajo el Gobierno socialista de Felipe González, le nombran director de los servicios informativos de Televisión española, en sustitución de Enrique Vázquez. Entre los escándalos políticos de la época en que él estada de director de TVE, vio la luz la polémica generada por la sobreimpresión de las siglas del PSOE en la repetición de los goles de Emilio Butragueño en el partido España-Dinamarca del mundial de fútbol de 1986, en el Telediario 2 en junio de este año. En estos años en los que fue jefe de TVE coincide con la época del GAL.

Sería al año siguiente, en 1987, cuando se incorporaría al Diario de Barcelona, del que fue redactor jefe para convertirse en su director.

Polémico. Sin duda, uno de los adjetivos que mejor le definen. Y no solo por su puesta en escena en los platós de Mediaset cuando se junta con su colega María Antonia Iglesias. Ha tenido problemas con numerosos colectivos.

Uno de ellos fue con la Asociación de Victimas del Terrorismo por la defensa del asesino de Paracuellos, De Juana Chaos. Esto le llevó numerosas críticas, una de ellas fue la de Alfonso Rojo: “El hecho es que De Juana Chaos, un criminal terrorista sin arrepentir, en unos días estará en la calle. Pero Enric Sopena pone el acento en otro lado,… Resulta vomitivo ver como periodistas, con aparente pedigrí democráticos, rompen lanzas a favor de asesinos como este”.

En 2008 Sopena y su diario digital, fueron condenados por publicar información falsa para difamar a la AVT y a su entonces presidente, Francisco José Alcaraz. Publicó artículos en los que acusaba a Alcaraz de cobrar hasta 200 euros diarios de la AVT, en concepto de dietas, y que su mujer recibía 3.000 euros de sueldo de la asociación.

En noviembre de 2010, el periodista Enric Sopena decidió recurrir ante el Tribunal Supremo la sentencia de la Audiencia Provincial de Jaén, que desestimó el recurso de apelación interpuesto por el periodista, tras ser condenado a pagar 2.700 euros al ex presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Francisco José Alcaraz, por intromisión a su honor y al de su mujer, Mamen Álvarez.

Aun así, él se definió como víctima ya que se atentaba contra la libertad de expresión, libertad a la que frecuentemente se acoge para decir lo que le brota. El que lo que diga sea real o no, esté o no contrastado es lo de menos.

Otro de los problemas más sonados que tuvo Sopena fue el despido de Carlos Carnicero, uno de los columnistas principales de su periódico, hasta que por criticar al ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, molestó a su director, quien le despidió mediante un correo electrónico. Carlos Carnicero, en su blog, dio su opinión sobre el asunto. No tuvo reparos a la hora de retratarlo: “Su historia, la de Enric Sopena, es la de un perro de presa. Primero fervoroso miembro del Opus Dei…En todas sus épocas profesionales ha sido igual (...) Su naturaleza es la subordinación a quien le da de comer”.

Carlos Carnicero continuó dedicando duras palabras a su antiguo jefe: “Siento un enorme desprecio por Sopena por lo que significa de demostración de que los comisarios políticos todavía tienen vigencia. A él seguro que no le cuesta conciliar el sueño, porque está acostumbrado a compatibilizar su conciencia con sus intereses”.

Enric Sopena, no es un personaje indiferente. Para los más radicales, un ídolo. Para los más sensatos, una persona que le gusta estar en el punto de mira, a veces, sin pensar en las consecuencias de lo que ello conlleva.


miércoles, 12 de marzo de 2014

En memoria de los héroes del ayer

Lo recuerdo. Hace 10 años cuando yo, con apenas 12, una insignificante murciana, solo pensaba en Madrid y en lo que allí pasaba. Mis infantiles pensamientos se volvieron de pronto adultos. Llegaba una excursión del colegio a la playa (más concretamente de la manga), un día intenso de diversión con las amigas. De repente, escuchamos lo que pasó por la radio del autobús. Ya en casa estaba como la mayoría de los españoles: pegada al televisor esperando nuevas noticias, viendo imágenes que han quedado grabadas en la triste historia de nuestro país y en nuestras mentes. Dijeron muchas cosas, entre otras, de las que recuerdo, que faltaba sangre para los heridos y que todos aquellos que pudieran fueran a donar,… pero yo aún era muy pequeña, estaba en Murcia y no podía hacer nada. Aun así lo recuerdo con una claridad pasmosa, como si fuera ayer.

Todo el país quedo conmocionado. Unos trenes volaban por el aire a causa de una bomba terrorista en Atocha. La primera pregunta que aún hoy en día viene a la cabeza es “¿por qué?” solo muerte, miedo y terror. No se entiende nada. Solo viene la frustración y la impotencia. Un país desorientado que se unió solidariamente pensando en todas aquellas familias destrozadas, el poder del bien hasta en estos gravísimos casos prima sobre el odio.

El 11M no solo ocurrió en Madrid, el 11M le ocurrió a todos aquellos que veían lo que pasaba, le ocurrió a los que creen en la libertad y en la democracia. Faltaban unos días para las elecciones generales y todo lo que  pasó, traía detrás algo serio.

Se exigieron responsabilidades, las cabezas de los culpables. Pero las prisas no son buenas y menos en este caso. Aún faltan datos, cosas por resolver, la teoría de la conspiración llena la cabeza de los ciudadanos, llena libros y artículos, pero muy a nuestro pesar no podemos actuar en caliente, no se puede actuar con especulaciones que remueven el dolor y que no llevan a nada sino van acompañadas por pruebas.

Una vez enterrados los muertos y curados los heridos toca hacer un cambio, replanteemos la pregunta: “¿para qué ha ocurrido esto?”. Es complicado y doloroso, pero el intentar contestar a esta pregunta, hace que continúe la lucha, que se camine hacia delante y que el dolor y que la vida de esos casi 200 muertos y centenares de heridos cobre sentido. Pero ese día, y los que le sucedieron, miles de personas se unieron a la desgracia de Madrid acompañando y ayudando a las familias, cada uno con lo que mejor sabía y podía hacer. Lo bueno de las oración es que no entienden de distancia, funcionan igual.  


Sin duda ha sido uno de los peores días de España, pero también fue un día grabado a fuego en la memoria. Ese día, el 11 de marzo de 2004 surgieron héroes, personas anónimas que con su ejemplo nos hicieron creer en las maravillosas capacidades del ser humano. Nos demostraron que una vez más el hombre supera infinitamente al hombre y que tal como dijo Víctor Frankl: “el ser humano aquel que ser que creó las cámaras de gas y que. A la vez, entró en ellas con paso firme y musitando una oración”.